
Los usos más habituales en relación con la menta son el tratamiento de la flatulencia, los cólicos, las cefaleas y los trastornos menstruales. Es también común su uso para abrir el apetito y contra algunas irritaciones de la piel. Su aplicación es casi siempre en forma de infusión, aunque también se usa cutáneamente en forma de compresas húmedas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario